Hace aproximadamente un año me aterraba la idea de que filosofía fuese un aburrimiento de asignatura y pensaba que para lo único que me iba a servir era para bajarme la media porque no la iba a disfrutar, pero un año después me he dado cuenta que ha sido todo lo contrario.
Filosofía ha sido un choque de realidad con muchas cosas que nunca me hubiese llegado ni a imaginar, me ha hecho incluso dudar de mis creencias y no solo eso, sino que creo que no había pensado en los 17 años que llevo viviendo; pero más allá de los contenidos de la asignatura, considero que es una asignatura muy complicada de dar parcialmente, y probablemente es de lo que más me ha gustado, que jugase de abogado del diablo con todos y cada uno de los filósofos, defendiéndolos pese a su ideologías.
¿Lo peor? Lo paréntesis psicopedagógicos; rompían el ritmo de la clase y siempre se proclamaba un incómodo silencio después, considero que alguno que otro era necesario, pero aun así me impactaron bastante; por todo lo demás las clases muy amenas y cómodas, fáciles de seguir y pese a autores como Kant o Nietzsche que me han resultado tremendamente complejos, el resto del temario me ha aparecido muy interesante y fácil de estudiar.
Los exámenes, muy adecuado el hecho de que haya varias maneras de evaluar a los alumnos ya que nos beneficia el hecho de no ir a por todo en un único parcial; y las lecturas de hecho me han parecido muy adecuadas, aunque los exámenes de estas me han resultado los más complicados ya que son de pura reflexión.
Como conclusión, y aunque el profesor no los quiera comentar, me encantaría saber sus puntos de vista y opiniones sobre los autores, ya que como he explicado antes es muy parcial.
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